El Centro de Jubilados «Amor y Paz» de Rawson de la provincia de Chubut, renovó su comisión directiva, que es encabezada por la señora María Valderas, y en el marco de la asamblea realizada quedó asentado en actas las irregularidades detectadas en perjuicio de la institución, la falta de rendición de cuentas y el dinero faltante de fiestas, ferias, eventos y hasta recibos fraguados.
Así se informó en el acta de la asamblea llevada a cabo en diciembre último, al momento de renovarse las autoridades de la comisión directiva. Junto a Valderas integran la nómina Alberto Figueroa, vicepresidente; Marta Michelena, secretaria; Evangelina Gómez, tesorera; Carmen Urrutia, Evar Campos y Esther Obelar, vocales titulares; María Guzmán Roberts, revisora de cuentas titular y Rosa Morales, revisora de cuentas suplente.
Para destacar, anticiparon que como comisión directiva pondrán en marcha una reforma estructural con dos comisiones de trabajo: comisión de Bienestar Social y comisión de Cultura y Deporte.
Durante el mes de enero, señalaron «se trabajó a puertas cerradas en la limpieza y el acondicionamiento del salón e instalaciones del Centro de Jubilados».
Han mantenido reuniones con autoridades de Pami de Trelew y Rawson, de la Defensoría de Adultos Mayores; con el intendente Damián Biss y representantes de PAMI de Comodoro Rivadavia.
Se han realizado gestiones en comercios y se está avanzando en los programas que se llevarán adelante a través de talleres de recreación y esparcimiento para los afiliados a PAMI y a la institución.
La comisión que por 10 años encabezó la señora Alba Tripailaf, señalaron los flamantes directivos, «no respetó el estatuto e interpretaban mal varios artículos; no se informaba a Inspección General de Justicia sobre la convocatoria de asambleas; no se exhibía padrón de socios; en el año 2023 se realizaron 13 fiestas en el 2024, 15 fiestas, festejos y eventos para recaudar fondos y no hay registros económicos ingresados a la Tesorería del Centro de Jubilados.
«Se compraban y adquirían tarjetas, se hacían ventas de comestibles, ferias y se transferían los montos a cuentas personales de integrantes de la comisión y no hay registro de ingreso a la cuenta del Centro de Jubilados», señalaron, indicando que se encontró un recibo «por un pago de 76 mil pesos en concepto de sonido, cuando el sonido fue donado por una firma comercial de Rawson, así como la cena por la que se cobró tarjeta, que también fue donada», señalaron.

