En los últimos años, pandemia mediante, el uso de la tecnología se ha extendido a una velocidad vertiginosa, por lo general haciéndonos la vida más fácil a todos. Pero para un segmento específico de la población, los adultos mayores, este fenómeno en realidad es vivido hoy como una barrera que, por el contrario, le complica la existencia, ya que les cuesta más aprender el manejo de los artefactos tecnológicos y de las aplicaciones virtuales.
Un reciente estudio del Instituto de Estadísticas de la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Córdoba (Inedep), dio cuenta de esta fuerte incomodidad con la tecnología que siente y hasta padece buena parte de la población de mayor edad.
Según el informe, buena parte de los adultos mayores tiene un teléfono celular (el 76,3 por ciento), pero la inmensa mayoría lo utiliza sólo como medio de comunicación, sin aprovechar el resto de las posibilidades que ofrece hoy el universo digital.
Asimismo, 1 de cada 10 (10,9 por ciento) tiene una computadora personal en sus hogares, pero también le da un uso muy limitado.
“Otras funcionalidades de la tecnología digital, como hacer trámites “on line”, sacar turnos médicos, hacer compras virtuales o acceder a páginas web, les representan grandes dificultades, también porque su visión y las posibilidades de manipulación de los artefactos son reducidas”, destaca el informe.
De hecho, sólo el 25,6 por ciento de los adultos mayores reconoce que maneja bien la tecnología. La gran mayoría (67,3 por ciento) percibe que la usa “regular” o “mal”.
El desconocimiento, la falta de información, y principalmente, el miedo a cometer errores al manejar los dispositivos tecnológicos, son las principales barreras de acceso que encuentran hoy las personas de mayor edad.
4 de cada 10 tienen temor a equivocarse, borrar datos, sufrir estafas o romper el aparato que están manipulando, según las preocupaciones más mencionadas en la encuesta. Asimismo, un 30 por ciento aseguró haber sido víctima de extorsiones o intentos de estafas virtuales durante la pandemia.
A mayor edad, aumenta también la dependencia de terceras personas para que los ayuden a desenvolverse en el mundo digital. Pero lo cierto es que 6 de cada 10 adultos mayores no cuentan con alguien cercano que pueda asistirlos en este sentido.
Frente a este escenario, sería importante que los adultos mayores pudieran acceder a cursos de capacitación en manejo de tecnologías digitales, que acorten la brecha de acceso por falta de conocimiento.